El cine español vuelve en 4K a los Festivales Internacionales
Miguel López, responsable de marketing de FlixOlé y encargado en Mercury Films, explora el proceso de distribución a festivales de las películas restauradas
El documental ‘Vestida de azul’ (1983) abordaba por vez primera el tabú de la transexualidad y descubría la cruda realidad de las personas del colectivo. Dirigida por Antonio Giménez-Rico y fotografiada por Teo Escamilla – quien también intervino en la producción del filme junto a Jaime de Armiñán—, ha pasado de ser una película de culto de difícil acceso a proyectarse en 4K en Berlinale Classics, área del Festival de Berlín dedicada a las restauraciones y redescubrimientos cinematográficos. Esta es la segunda producción española en programarse en esta sección, después de la pasada selección de ‘Deprisa, deprisa’ (Carlos Saura / DP Teo Escamilla, 1981).
Ambos títulos fueron remasterizados por Mercury Films en colaboración con la plataforma FlixOlé -ambas empresas de Enrique Cerezo- en el marco de sus labores de conservación y difusión del patrimonio audiovisual español. Para entender la estrategia comercial de una actividad privada en el ámbito de la restauración fílmica hemos hablado con Miguel López, responsable de marketing de FlixOlé y encargado en Mercury Films del proceso de distribución a festivales de las películas restauradas. “Para poder comercializar un catálogo que cuenta con más de 9000 películas, este debe someterse a unos procesos de restauración para la película en buenas condiciones. Para ello se abrió hace 24 años el laboratorio de restauración, que lleva funcionando desde entonces”, nos cuenta Miguel. “La parte de festivales internacionales nació en 2023, cuando decidimos dar un salto, al ver que tenemos el potencial y los medios para hacerlo. A partir de entonces, no solamente hacemos restauraciones de películas en 4K, sino que además las posicionamos en festivales internacionales de clase A en su sección clásica”.
La distribución comenzó con el festival de Cannes en 2023, y siguió en Venecia, en Berlín, en el festival de cine clásico Lumière, así como en nuestro país en San Sebastián y recientemente en Málaga. “Esta es también una labor de difusión que viene de FlixOlé, que, además de ser una plataforma de streaming, de ocio, tiene también ese valor didáctico por el que cualquiera puede entrar en la plataforma y acceder a casi todo el cine español en buena calidad de imagen y sonido, con sus aplicaciones en TV y en móviles. Y esa parte de hacer accesible el cine español también nos motiva mucho. De igual manera, para mostrar que aquí restauramos cine y tenemos la última maquinaria, el mejor escaparate son los festivales de cine”.
A la hora de restaurar un título, en lugar del proceso habitual de apostar por una película y restaurarla antes de iniciar su promoción, Mercury Films hace el proceso inverso, iniciando un diálogo con el certamen donde quieran distribuir. “Como tenemos un catálogo inmenso, podemos sentarnos con el programador del festival para saber lo que tiene en mente, y en función de ello hacemos la propuesta”, constata Miguel. “Por ejemplo, para la selección de Vestida de azul en Berlinale, en una primera conversación con la coordinadora de programación de la sección clásica supimos que estaban buscando un documental como novedad. Y con esa pequeña pista, sabiendo que Berlín es un festival que no solo apuesta por clásicos, sino que también tiene espacio para joyas menos conocidas y conociendo un poco la política del festival, se me ocurrió ‘Vestida de azul’, un documental que yo tenía en mente desde hace mucho tiempo, esperando a ver dónde podía encajar. Así que lo presentamos y nos lo seleccionaron”.
En términos generales, a la hora de programar películas clásicas, a los festivales «les suele gustar que tengan un pasado por el festival, como ocurrió con ‘Deprisa, deprisa’, una película que en su día ganó el Oso de Oro de Berlín y cuando cumplía 1 año del fallecimiento de su director”. De igual manera, la restauración de ‘Furtivos’ (José Luis Borau, DP Luis Cuadrado, 1975), ha sido la película de oro del 28 Festival de Málaga y se verá también en Klasikoak del 73 Festival de San Sebastián – donde ganó la Concha de Oro- coincidiendo con el 50 aniversario de la película.
Una vez surge la apuesta por algún título, Mercury Films solicita los materiales fílmicos a la Filmoteca que los tenga archivados. “Ellos hacen lo que es el proceso anterior a la restauración, la preservación, que implica tener los materiales fílmicos a unas temperaturas y a unas condiciones de humedad muy concretas para evitar que se deterioren”. Una vez son recibidos los rollos de celuloide, estos se meten en un escáner que genera un fichero digital con la película ya en calidad 4K. “Ese fichero digital tiene dos problemas: por un lado, el color se ha deteriorado y es incorrecto y, por otro, puede tener puntos, rayas, hongos o temblores de imagen…las ‘pelis’ muy antiguas, según cómo se hayan conservado, pueden estar muy deterioradas. Por tanto, primero realizamos un proceso de etalonaje donde se intenta dar unidad a la película en cuanto al color y que ese color sea el original. Por eso, nos gusta contar con el director o el director de fotografía cuando hacemos estos procesos para que ellos supervisen y nos den pistas de cómo hacer la restauración”, explica Miguel. Por el laboratorio de Video Mercury han pasado cineastas como Víctor Erice, Juanma Bajo Ulloa, Fernando Trueba o Alejandro Amenábar. ¿Qué ocurre si, como en el caso de ‘Furtivos’, se da la circunstancia de que ni el director ni el DOP están ya disponibles? “Decidimos contactar con Manuel Gutiérrez Aragón, que fue el guionista de la película, dirigió algunas secuencias, y estuvo muy implicado en todo el proceso”, comenta Miguel.
Una vez realizado el etalonaje, se pasa al proceso propiamente de restauración, que se lleva a cabo mediante software. “Se van limpiando, frame a frame, todos los desperfectos, intentando dejar la película lo más limpia y fiel a lo que fue en el momento de su estreno”, nos detalla.
Acerca de ciertas restauraciones en las que, estando el director o directora de fotografía aún en activo, no han participado, la cuestión es que este proceso entre la institución privada y la pública se puede dar a la inversa. “’Tasio’, por ejemplo, no es una restauración nuestra. Es una película que pertenece a Video Mercury Films, pero nos la pidió Filmoteca Vasca porque tenían un proyecto de restauración que, aunque gestionaron ellos, se hizo en Bolonia, en L’Immagine Ritrovata, que se considera el laboratorio de restauración más importante del mundo y que tiene detrás a The Film Foundation, la empresa de Martin Scorsese. Sé que fue el director Montxo Armendáriz quien participó en el proceso».
Mercury Films cuenta con una plantilla fija de etalonadores y de restauradores que deberá nutrirse en un futuro de nuevos profesionales. «Me parece estupendo que se haya puesto en marcha este máster para que los estudiantes conozcan cómo es el proceso de restauración desde el inicio hasta el final, pues aquí habrá necesidad de reemplazo”.
*Fotogramas ‘Vestida de azul’.
La Academia de Cine y la Universitat de València unen fuerzas para revivir fotografías dañadas tras la dana
En un contexto más actual la Academia de Cine y la Universitat de València han presentado ‘Las capas de la memoria’, un proyecto de creación que, mediante el lenguaje audiovisual, ha revitalizado materiales gráficos afectados después de la dana del 2024, que han sido rescatados por el programa ‘Salvem les fotos’ del Área de Patrimonio de la institución académica, y que ha cristalizado en ocho piezas audiovisuales.
Esta iniciativa, coorganizada junto a la institución académica, a través del Aula de Cinema y el Área de Patrimonio, ha servido para devolver a la vida álbumes familiares y materiales fotográficos que fueron dañados tras la dana que arrasó varias localidades valencianas el pasado octubre. Los trabajos han sido desarrollados por 15 alumnos de Comunicación Audiovisual, Sociología, Periodismo e Historia del Arte de esta universidad y han sido guiados por los directores Nuria Giménez, Sergio Oksman y Víctor Serna.
Desde el pasado mes de mayo, el alumnado participante ha trabajado técnicas del cine documental con estos materiales rescatados del daño causado por el agua y el barro, y que han sido cedidos para este efecto por familias propietarias de las mismas.
“La pérdida de patrimonio fílmico, sea profesional o doméstico, es una de las tragedias añadidas a la catástrofe”, ha señalado hoy en Alaquàs (València) el presidente de la Academia de Cine, Fernando Méndez-Leite, quién también ha afirmado que Valencia y todas las localidades afectadas por la dana “son lugares decididos a salir adelante a pesar de las adversidades. Nos complace unir fuerzas con sus ciudadanas y ciudadanos a partir de estos programas que llevamos a cabo aquí”.
“Desde el primer momento la Academia ha mostrado su solidaridad con las víctimas y con las personas afectadas por la dana, y especialmente con todas las personas del audiovisual que han sufrido los efectos de esta terrible tragedia.”, recordó el responsable de la institución.
La juventud, esencial en la recuperación de la memoria
Durante la presentación, la manager de Relaciones Institucionales de Netflix, Beatriz Álvarez Gallardo, quiso reivindicar el papel de los jóvenes en la reconstrucción de las zonas afectadas, porque “fueron ellos los que dieron lo mejor de sí mismos. Son ellos los que mostraron su compromiso, y son ellos los que han hecho posible el proyecto ‘Las capas de la memoria’, recogiendo recuerdos y dándoles vida de nuevo a través del cine”.
En la misma línea fueron las declaraciones de Ester Alba, vicerrectora de Cultura y Sociedad de la Universitat de València: «Un proyecto como este es colectivo, es una red colaborativa impulsada por nuestros jóvenes, que fueron el modelo. Este patrimonio olvidado, el de las familias, es muy importante. Por eso, rescatar estas fotografías no es solo rescatar objetos, es hablar de las personas. Queda mucho por recuperar y proyectos como este lo han posible”, dijo.
El castillo de Alaquàs, una de las localidades afectadas por la dana, acogió la presentación de este proyecto y el estreno de las ocho piezas documentales. Su alcalde, Antonio Saura, subrayó que esta iniciativa que “conecta patrimonio, cine y comunidad” es muy importante. “Recuperar el estado de ánimo de la ciudadanía es algo que nos va a costar mucho, tenemos que seguir trabajando en ello e implicarnos, pero acciones como esta nos ayudan a hacerlo posible».
El auditorio de este edificio patrimonial contó con la presencia de algunos de los familiares que prestaron sus fotos para este proyecto y con varios de los participantes en el taller ‘Las capas de la memoria’. También estuvo presente el vicepresidente de la Academia de Cine, Rafael Portela, representantes de diferentes instituciones locales y vecinos de la localidad.
La iniciativa se enmarca dentro del Campus de Verano de la Academia de Cine, una iniciativa de la institución en colaboración con Netflix y con el Ayuntamiento de València que nació en 2022, y que en estos días celebra su cuarta edición. Tiene el objetivo de visibilizar y potenciar la diversidad e inclusión en la industria audiovisual, así como el valor del lenguaje audiovisual como herramienta para generar impacto en el ámbito comunitario.
