Cambio de imagen para el grupo mainstream español Auryn con la Blackmagic Cinema Camera

Greg A. Sebastian rueda material para el nuevo disco del grupo, Anti Heroes

Greg A. Sebastian estudió dirección de cine en el Centro de Estudios Cinematográficos de Cataluña y la Universidad de Valladolid antes de fundar su propia empresa en 2004. En sus comienzos rodó documentales, spots publicitarios y vídeos musicales, aunque más recientemente se ha dedicado a estos últimos en proyectos con compañías discográficas de renombre tales como Universal Music y Sony Music, como en este caso, rodando material para el grupo mainstream Auryn con cámaras Blackmagic.

 Fomentando la creatividad
 
“Antes de pensar en cualquier idea para un vídeo-clip necesito escuchar la canción al menos 50 veces, no es broma”, explica Sebastian. “Necesito ‘contaminarme’ de ella antes de poder coger lápiz y papel y empezar a anotar cualquier cosa. Luego, mi cabeza actúa como una lavadora, dando vueltas y vueltas hasta que termina el ‘centrifugado’.”

Como en cualquier producción, siempre hay que considerar los costes a la hora de desarrollar una idea. “Después vienen, claro está, las limitaciones a nivel de presupuesto, más con la actual crisis del sector que estamos padeciendo. ¿Pero no dicen que la falta de medios hace potenciar todavía más la creatividad?”

Breathe Your Fire fue sin duda un proyecto ambicioso desde el punto de vista financiero. “Trata de una invasión extraterrestre a escala mundial donde un grupo de jóvenes con poderes (los integrantes de la propia banda) intentarán hacer frente a la amenaza.”

Arriba: Fotograma Raw. Abajo: Etalonado

Sebastian revela que no le gusta planificar cada aspecto de sus producciones antes del rodaje. “No me gusta ceñirme a los guiones técnicos. Son un punto de partida pero no un mapa para seguir al detalle. Sí, mi equipo me odia por eso, sobre todo mi jefa de producción.”
 
“Necesito estar en el set con mis actores, empaparme de la localización, respirarla. Improvisar y crear en el instante hace más excitante el proceso. Hitchcock decía que lo más aburrido de la creación de una película era el rodaje, porque lo tenía todo perfectamente planificado en su guión técnico antes de ir a rodar y no había sorpresa o motivación alguna mientras rodaba. Para mí es todo lo contrario”, dijo Sebastian.
 
Creando el look
 
El vídeo de Breathe Your Fire incluye varias escenas grabadas en Londres que plasman la apariencia general para el sencillo. “Londres y su cielo invernal plomizo y nublado nos daba una paleta muy suave y poco contrastada, perfecta para conseguir la atmósfera que buscábamos”, indicó Sebastian. “Usamos filtros ND para poder rodar con diafragmas abiertos con los cuales conseguir una profundidad de campo bastante reducida. A la hora de filmar en interiores se buscaron contrastes más pronunciados, pero sin llegar a perder la suave transición que queríamos entre las sombras y las zonas medias.”

Arriba: Fotograma Raw. Abajo: Etalonado.

Sebastian comenta que las condiciones de iluminación al rodar en exteriores eran impredecibles, lo cual supuso un reto para el equipo de producción. “Rodar en interiores siempre supone un control de la iluminación y de todos los aspectos de una grabación que no te permiten los exteriores. Por eso, como en casi todas las producciones, los exteriores supusieron un reto al que enfrentarse, más todavía en una gran ciudad como Londres. Por una parte, el cielo nublado ofrecía una luz suave muy de agradecer, pero por el contrario, los cambios variables de luz hacían que tuviéramos que estar muy pendientes de conseguir un raccord de luz creíble. Uno de los aspectos que nos decidió a rodar con la Blackmagic fue la ventaja de poder generar archivos de 12 bits en RAW.”

 Colorimetría de película
 
“Tanto la BMCC como la Pocket me han dado el look que buscaba gracias a la grabación con la curva “film” y a la latitud increíble que supone grabar en RAW. Estoy sorprendido de los fantásticos tonos de piel que se consiguen con esta cámara.”
 
“La colorimetría de estas cámaras es muy buena. Los colores obtenidos y la manera de tratar las altas luces me recuerdan mucho a la película tradicional. Si usamos la Blackmagic Cinema Camera con un buen conjunto de ópticas podemos lograr una apariencia clásica sin perder los detalles capturados por el sensor de 2,5K. Soy un director de pocas lentes y para filmar utilizamos una 24, una 35 y una 50mm fijas junto con el sigma 18-35 F1.8”, reveló Sebastian.
 
Muchos de los planos del horizonte londinense se filmaron desde el London Eye con la Pocket Cinema Camera y el 12-35 F2.8 de Panasonic, al igual que las imágenes iniciales de los chicos japoneses. “Lo que más me gusta de la Pocket es su tamaño compacto. Una cámara pequeña que pasa ‘desapercibida’ pero que ofrece unas imágenes finales con una calidad a la altura de su hermana mayor.”
 
“La vinculación de los gráficos por ordenador con el material grabado fue fácil gracias a la posibilidad de generar archivos RAW”, indicó Sebastian. “No teníamos una apariencia predefinida y por lo tanto pudimos hacer coincidir los elementos 3D con el material grabado y luego determinar la mejor tonalidad para los planos compuestos. La cantidad de detalles en los archivos 2,5K también facilitó el seguimiento en 3D y le permitió ahorrar mucho tiempo a José Jacas, nuestro especialista en VFX.”
 
“Mi primer trabajo con la Blackmagic Cinema Camera ha supuesto actualmente que sea la cámara con la que ruedo la mayoría de las producciones. La posibilidad de grabar archivos en RAW a 2,5K en la propia cámara en discos SSD sumado a sus 13 pasos de latitud la convierten en un caballo ganador”, concluyó Sebastian.

A continuación, podéis ver el resultado final de este rodaje: